¿De que serviría contratar una tarifa móvil con 1000 minutos de llamada gratis si no llamas por teléfono?, Si lo que haces con el móvil es navegar a todas horas ¿No te convendría más una tarifa con más megas? Lo mismo pasa con la tarifa de Luz. Ya puede ser un ofertón que si no se adapta a tus necesidades no podrás aprovecharlo. Antes de contratar nada, hace falta entender la tarifa de luz. De lo contrario, será imposible ahorrar por mucho que las compañías eléctricas nos ofrezcan mil alternativas.
¿Cómo funciona la tarifa de luz?
Para entender lo que te cobran las compañías eléctricas debes saber que principalmente tu tarifa de luz se divide en dos conceptos básicos: La potencia contratada y el consumo. La potencia es la parte fija de tu factura mientras que el consumo es la parte variable. Vamos a ver en qué se diferencian ambas partidas.
Potencia contratada
En la tarifa de luz, la potencia contratada se puede ver como la capacidad que tiene tu hogar para mantener varios electrodomésticos enchufados al mismo tiempo. A más potencia contratada más electricidad se podrá consumir en un mismo instante sin que salten los plomos. Por lo tanto, un hogar con una familia de 3 miembros no necesitará contratar la misma potencia que un coworking donde hay más de 10 ordenadores funcionando al mismo tiempo.
La potencia se mide en Kilovatios (KW) y es la parte fija de tu tarifa de luz. Es una cuota fija porque no depende de lo que gastes o dejes de gastar. Puedes no enchufar ningún electrodoméstico en un mes que la compañía seguirá cobrándote esta partida sin excepción alguna. Cuantos más KW de potencia contrates, más cara será la parte fija de tu tarifa de luz.
Consumo eléctrico
Una cosa es lo que tu sistema pueda aguantar y la otra es lo que realmente consumas. Cada electrodoméstico gasta “x” Kilovatios cada vez que lo enchufas. El consumo eléctrico se mide en Kilovatios por hora. Es decir, que si tu horno gasta 1100 vatios la hora (1,1KW/h) y lo tienes enchufado 2 horas, el consumo total habrá sido de 2200 vatios (2,2KW). Dependiendo del uso que hagas de tus electrodomésticos y del tiempo que los tengas enchufados la parte variable de la tarifa de luz subirá o bajará. Así de sencillo.
Como ahorrar en tu tarifa de luz
Para ahorrar dinero en tu tarifa de luz existen dos vías: Ajustar la potencia contratada y rebajar el consumo. En cuanto a tarifas, la potencia no tiene mucho misterio. El precio de la potencia está regulado por el estado y dependiendo de la que contrates pagarás más o menos. Si nunca de los jamases te han saltado los plomos, es porque quizás tengas un exceso de potencia contratada. Ajústala y pagarás menos. Si, por el contrario, te saltan a menudo, deberás contratar más.
Descubre nuestras tarifas para la luz
En cuanto a la parte variable de tu tarifa de luz existen varias formas para ahorrar. La primera hace referencia a tus hábitos. Cuídalos e intenta ahorrar energía. No te dejes las luces encendidas, apaga el ordenador si no lo necesitas o no abuses del aire acondicionado en verano y de los radiadores en invierno. La segunda forma de rebajar tu factura atañe a las compañías eléctricas. Cada compañía tiene sus precios de €/Kwh. Es decir que la que te cobre más barato el KW por hora será la más beneficiosa para ti. Existen además algunos planes, en los que la compañía vende el KW/h a un precio más económico durante ciertas horas del día y más caro en otras. Estudia cuáles son tus horas punta de consumo eléctrico y adapta tu tarifa de luz a estos horarios.