Si tienes una vivienda en alquiler, debes saber que declarar los ingresos en la declaración de la renta es obligatorio. Pero también puedes desgravar el alquiler aplicando deducciones estatales que te permiten reducir el IRPF. Porque ser propietario también tiene ventajas fiscales.
En este artículo te explicamos qué gastos puedes deducir a nivel estatal y que requisitos debes cumplir para llevarlo a cabo.
¿Cómo desgravar el alquiler si soy propietario?
Como arrendador, los ingresos que obtienes del alquiler tributan como rendimientos del capital inmobiliario. A nivel estatal, puedes deducir una serie de gastos relacionados directamente con el inmueble alquilado, siempre que estén justificados y se declaren correctamente.
Estos son los gastos deducibles reconocidos por Hacienda a nivel estatal:
- Intereses del préstamo hipotecario si financiaste la compra de la vivienda.
- Gastos de conservación y reparación, como arreglos por averías o mantenimiento ordinario.
- Tributos estatales y locales relacionados con la vivienda (IBI, tasas de basura…).
- Primas de seguros vinculadas al alquiler (hogar, impago, etc.).
- Gastos de comunidad y suministros (si los asume el propietario).
- Honorarios profesionales, como los de agencias inmobiliarias o asesores.
- Amortización del inmueble y sus bienes (hasta el 3 % anual sobre el valor de adquisición o catastral, el menor de ambos).
En el momento de declarar las rentas del alquiler, hay que tener en cuenta si se declara como capital inmobiliario o como actividad económica. Para saber si se debe hacer de una u otra manera es muy sencillo: En el momento en el que se tiene una persona contratada a jornada completa para gestionar el alquiler constará como actividad económica.
¿Qué beneficios fiscales existen por desgravar el alquiler?
Si el inmueble está alquilado como residencia habitual del inquilino, puedes aplicar una reducción del 60 % sobre el rendimiento neto positivo del alquiler. Esta reducción está recogida en la normativa estatal y es una de las ventajas fiscales más importantes para los propietarios.
Recuerda💡 Esta reducción solo se aplica si todo está declarado correctamente y el contrato de alquiler cumple la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU).
Requisitos para desgravar el alquiler a nivel estatal
Para que puedas aplicar estas deducciones estatales, debes asegurarte de cumplir los siguientes puntos:
- Declarar los ingresos por alquiler en el modelo 100.
- Que el contrato esté en regla y el inquilino utilice la vivienda como residencia habitual.
- Guardar justificantes y facturas de todos los gastos deducidos.
- No haber alquilado la vivienda a familiares en condiciones no habituales (por debajo de mercado, por ejemplo).
¿Y las deducciones autonómicas por alquiler?
Además de las deducciones estatales, algunas comunidades autónomas pueden ofrecer beneficios fiscales adicionales en la declaración de la renta. Estas deducciones suelen depender de factores como los ingresos del propietario, la edad del inquilino, o si la vivienda está en zonas tensionadas, de acuerdo con la regulación que introdujo la Ley de Vivienda del 2023.
Todas las condiciones específicas autonómicas se pueden consultar gratuitamente en la web de la Agencia Tributaria, o en tu oficina más cercana.
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