Cómo preparar casa para vender paso a paso

Seguro que has oído aquello de: “una imagen vale más que mil palabras” o “la primera impresión es la que cuenta”. Pues en la venta de pisos, ambos dichos se cumplen a la perfección. Las imágenes de tu anuncio serán lo primero que vea el comprador. Según lo que transmitan, conseguirás captar o no su atención. Contar con unas buenas fotos es, sin duda, algo muy importante. Por ello, hoy vamos a enseñarte cómo preparar casa para vender paso a paso.

Una vez hecha la sesión fotográfica tu casa pasará a estar en el escaparate. Un escaparate abarrotado de cientos de viviendas de similares características a la tuya. Para hacer que tu casa destaque entre las demás, debes mostrar su mejor cara. En tus manos estará, preparar casa para vender dejándola como nueva. Pero quizás con eso, no sea suficiente. Si de verdad quieres que tu anuncio marque la diferencia, es imprescindible contar con la experiencia de un fotógrafo profesional. Los pequeños detalles son los que harán que tu sesión de fotos pase de vulgar a excelente, y los que harán, en definitiva, aumentar el número de visitas final.

Pasos para preparar tu casa para venderla

Que la limpieza no te de pereza

La limpieza es el primer y más importante de los pasos para preparar casa para vender. Quita el polvo, barre, friega y limpia los cristales a conciencia. Pon especial atención en las salas de la casa donde más se acumula la suciedad como la cocina y el baño. Es importante eliminar cualquier resto de cal en mamparas y de grasa acumulada en hornos y campanas, ya que puede verse en las fotografías. Si tu piso tiene terraza, también deberás recoger las hojas secas y la tierra del suelo.

La dimensión del orden

El orden es vital y necesario a la hora de preparar casa para vender. Y no sólo porque una habitación desordenada no entra por la vista de buenas a primeras. Lo es por otra razón, si cabe, más importante: Las dimensiones. Una habitación despejada permite al comprador hacerse a la idea del tamaño real de la estancia. De esta manera, será más fácil que el comprador se vea viviendo allí y especule sobre como distribuirá y amueblará cada estancia.

Una de las estancias donde más se valora el espacio es el salón. Para plasmar la amplitud en imágenes es necesario despejar el salón y dejar el suelo a la vista. Deberás retirar todos los objetos a la vista como mandos, cables o revistas e incluso apartar algún sillón si es preciso. El televisor deberá estar apagado para que se mezcle con el entorno.

Aprovecha la luz natural

La luz es uno de los aspectos que más se tienen en cuenta a la hora de comprar casa. Busca un momento del día en el que el sol ilumine tu hogar. Por último, abre las persianas y corre las cortinas para dejar que entre la luz. Preparar casa para vender a veces depende de algo tan sencillo como eso.

Elimina los elementos personales

Una casa con mucho carácter es más difícil de vender. Piensa que un comprador proyecta su futura vida en el hogar en cuestión. Si este, no se adapta a sus gustos, difícilmente conseguirás consolidar una visita. Para neutralizar tu hogar, prescinde de los retratos familiares, esconde los efectos personales y quita el exceso de decoración.

Para despersonalizar habitaciones y despachos, es necesario tener el estudio y las mesas de noche despejadas. No obstante, se puede añadir algún libro o elemento infantil como detalle. Pero debe ser algo sutil, que de lugar a la imaginación del comprador.

No te pases de frío

Despersonaliza, pero sin pasarte. Un hogar excesivamente frío no invita al público a querer entrar. Algunos elementos decorativos como plantas, jarrones, cojines o un bol de fruta fresca en la mesa, darán un toque de color y de vida a tu hogar. Preparar casa para vender, no es más que transformar un inmueble en el lugar más acogedor. En tu baño, por ejemplo, deberás quitar todos los objetos y productos de higiene personal. Sin embargo, puedes añadir un juego de toallas dobladas para darle ese punto de vida.

Los detalles importan

Los puntos fuertes de tu casa deben aparecer en la sesión de fotos. Si la vivienda cuenta con unas vistas preciosas, haz que queden plasmadas en alguna de las fotos. No obstante, no fotografíes sólo el paisaje. Intégralo junto algún elemento del hogar. Por ejemplo, puedes fotografiar el balcón junto a las vistas. La premisa es la misma con cualquier otro detalle. Chimeneas, escaleras de caracol, mosaicos… Hacer que estos elementos aparezcan sutilmente en la sesión de fotos, será el colofón para rematar la faena y vender una vivienda.