Contar con un avalista hipotecario sirve de ayuda para conseguir financiación, ya que sirve de garantía de pago, así que podrías avalar a un conocido que lo necesite. Pero cuidado, porque deberás cumplir una serie de requisitos y asumir los riesgos que implica. Te los contamos a continuación.
¿Qué es ser avalista hipotecario?
En el momento de solicitar una hipoteca, puede darse la circunstancia de que no se cumplan con los requisitos del banco, y que este, por tanto, te pida un aval, que actúa como garantía adicional de pago.
Así, el avalista hipotecario se haría cargo del pago de la deuda cuando el titular deje de hacerlo. Por eso esta figura es tan importante para la entidad financiera, ya que se asegura de que sí o sí haya alguien que cumpla con las obligaciones económicas del préstamo, puesto que aunque el titular no disponga de más capital, el avalista sí, pues, como veremos a continuación, es una de las condiciones.
Requisitos para avalar una hipoteca
Al representar una garantía de pago, el avalista hipotecario debe cumplir una serie de requisitos para poder ser admitido como tal por el banco:
- Ser mayor de edad.
- Tener unos ingresos elevados y estables.
- Contar con un patrimonio propio, que se usará como garantía extra ante un impago.
- Tener un historial crediticio limpio, es decir, no tener deudas pendientes.
Sí, el avalista hipotecario responderá ante los impagos del titular no solo con dinero, sino también con sus propiedades.
Por lo tanto, si se tiene una hipoteca, te será muy difícil poder convertirte en avalista hipotecario, solo podrás si a esta le queda muy poca carga pendiente.
Pero, ¿Y si ya soy avalista hipotecario y quiero solicitar una hipoteca para mí? Lo cierto es que puede resultarte más complicado conseguir financiación, ya que para la entidad bancaria esto supone un riesgo añadido, ya que no cuentan con tantas garantías de pago.
Ojo, porque estos son los riesgos de ser avalista hipotecario
Al ser el responsable de asumir el pago de las cuotas e intereses impagadas por el titular, no cumplir con esta obligación conlleva las mismas consecuencias legales, lo que implica que la entidad financiera podría embargarte el sueldo o los bienes inmuebles para saldar la deuda.
Asimismo, al convertirte en avalista hipotecario, tu nombre aparecerá en la Central de Información de Riesgos del banco de España (CIRBE), una base de datos que recoge todos los préstamos, avales, créditos y riesgos de los clientes, de manera que se reducirá tu capacidad de poder solicitar un préstamo, puesto que ya cuentas con una obligación de pago previa.
Caben destacar que los riesgos a asumir como avalista hipotecario dependerán del aval que se firme y de las probabilidades de impago por parte del titular. Eso sí, siempre podrás exigir la ejecución del aval cuando se demuestre la imposibilidad de pago del titular.
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Como ves, ser avalista hipotecario puede conllevar muchas complicaciones, pero no te preocupes si ya lo eres o quieres serlo, porque en Housfy podemos ayudarte a que consigas financiación para ti, incluso una hipoteca sin aval. Podrás conseguir las mejores condiciones posibles y sin necesidad de negociar con el banco, ya que nuestros brókers hipotecarios lo harán por ti, para que no tengas que preocuparte por nada.
