Vender o alquilar piso: ¿Qué es mejor?

Hay muchas ocasiones en las que se tiene que tomar una decisión acerca de una propiedad. Y, son muchos los motivos que pueden llevar a elegir una opción u otra. Si quieres cambiar de piso y eres titular de una vivienda, seguramente te plantees vender una vivienda, o, por otro lado, alquilarla y obtener una mayor rentabilidad. Pero, ¿Cómo calculamos los beneficios de alquilar o de vender un piso? No te preocupes, porque en este artículo entraremos en detalle en ambas opciones para saber si es mejor vender o alquilar una vivienda.

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Decidir si vender o alquilar un inmueble

Tanto una opción como la otra, conllevan tiempo. Decidir si vender o alquilar tu casa es una decisión muy importante y que tienes que meditar seriamente. Está claro que nosotros no tenemos la respuesta correcta, pero sí que tenemos las herramientas para ver qué te aporta una opción y otra. La decisión final dependerá de tu situación particular y del objetivo al que quieras llegar. Es por ese motivo que, a continuación veremos las ventajas y las desventajas en cada uno de los casos.

Vender una vivienda

El mercado inmobiliario es una inversión segura, ya que es un sector muy estable a largo plazo. Si bien es verdad que requiere de un importe monetario inicial muy elevado, con lo cual, es algo que no está al alcance de cualquiera. No obstante, en el momento que tienes una vivienda en propiedad, surgen las dudas sobre qué hacer, si mantener esta vivienda o no. Si antes de tomar cualquier decisión, quieres tasar una vivienda para vender, y saber cuánto vale tu casa, debes saber que existen herramientas que te lo permiten. Seguidamente veremos los pros y los contras de vender tu piso.

Ventajas

Si decides poner en venta tu propiedad, debes saber que estos son los beneficios:

Ingresos. Es la ventaja más evidente, en el momento de vender el piso, recibirás una gran cantidad de dinero a efectos casi inmediatos. Por lo tanto, es la mejor opción si necesitas liquidez de forma urgente.
No tienes responsabilidad. En el momento de la transmisión, dejas de tener poder sobre la misma, con lo cual, puedes dejar de preocuparte por su mantenimiento, etc.
Evitar gastos. Mantener una casa requiere de un gasto fijo. Si decides vender tu casa, dejarás de pagar las mensualidades correspondientes.
Herencias. En el caso de heredar bienes inmuebles y que correspondan a diferentes personas, la decisión más recurrente es vender piso heredado, y dividir los beneficios entre los implicados. Es una manera de evitar problemas entre herederos.
Beneficios fiscales. Si decides vender tu vivienda habitual para comprar otra, podrás beneficiarte de ventajas fiscales y podrás estar exento de tributar las ganancias patrimoniales. Sin embargo, hay que asegurarse y consultar el IRPF por la venta de vivienda.

Desventajas

Por otro lado, no todo podía ser perfecto. Vender un inmueble también conlleva otros aspectos no tan positivos:

Pérdida de patrimonio. Tener una vivienda en propiedad, da cierta estabilidad a largo plazo. Es por eso que, es importante analizar bien la situación y tus necesidades personales para no tomar una decisión precipitada de la que puedas llegar a arrepentirte.
Compleja tramitación. El hecho de vender un piso nunca ha sido tarea fácil. Requiere de un cumplimiento de normativa estatal, así como una serie de trámites y documentación a tener en cuenta. Asimismo, es importante calcular gastos venta vivienda para que no surja ningún imprevisto.
Tiempo. Además de el tiempo necesario para llevar a cabo todos los trámites, es importante tener en cuenta el tiempo para encontrar un comprador. Ya que, no siempre es fácil y, eso conlleva, tiempos de venta que se alargan en el tiempo. Con lo cual no es una acción inmediata.
Impuestos. Siempre que vendas una vivienda, deberás hacer frente a tres tributos principales: el IRPF, la Plusvalía Municipal y el IBI.

Alquilar un piso

Si, por el contrario, también te planteas poner en alquiler una vivienda, debes saber que también existen pros y contras. En muchas ocasiones no queremos asumir riesgos y decidimos despreocuparnos del tema. Pero a continuación veremos los beneficios de arrendar tu piso.

Ventajas

En este caso, alquilar una vivienda ofrece multitud de beneficios. ¡Vamos a verlos!

Patrimonio. Al fin y al cabo, la casa sigue siendo tuya, con lo cual, tienes cierta seguridad a largo plazo, en caso de llegar a necesitarla. Incluso si no te funciona el alquiler, te quedará la opción de venderla.
Aval bancario. Al ser titular de una vivienda, podrás usarla como garantía extra.
Ganancias a largo plazo. Te permite obtener un beneficio extra cada mes. Para poder saber si te sale a cuenta, es interesante calcular rentabilidad alquiler de un inmueble.
Revalorización. En el futuro esa vivienda puede llegar a costar mucho más dinero y, por lo tanto, podrás obtener un beneficio mayor. Así como darla a futuras generaciones.
Beneficios fiscales. Si alquilas tu vivienda para un uso habitual puedes acceder a una reducción en la declaración del IRPF del 50% o incluso 60%. Además, si el inmuebles se encuentra en una zona tensionada podrás optar a una mayor reducción.

Desventajas

Por último, arrendar una vivienda también puede suponer aspectos negativos que pueden ser clave a la hora de tomar la decisión:

Mayor riesgo. Un factor decisivo es elegir el inquilino ideal para tu vivienda. De no hacerlo, eso puede conllevar muchos problemas. Es por eso que, en Housfy, con la gestión de un alquiler seguro, garantizando el cobro de todas las cuotas.
Responsabilidad. Al mantener la titularidad de la vivienda, debes hacerte cargo de algunos aspectos. Aunque en el contrato de alquiler se deberá dejar constancia de quién es el responsable.
Gastos. Ligado con el punto anterior, el propietario tiene que encargarse de los gastos (aunque algunos son deducibles). Así como el IBI, el pago de la comunidad o posibles derramas.