Apalabrar las cosas suele ser la vía más rápida para prácticamente todo, no obstante, no siempre es la más segura. Al alquilar un piso, tanto como arrendador como arrendatario, muchos usuarios se preguntan si deben establecer un contrato o no, y si este debe registrarse. Veamos la respuesta y la cara buena y mala de cada opción.
Es legal alquilar un piso sin contrato, pero no muy inteligente
No, no es obligatorio hacer un contrato al alquilar un piso, pero ojo, porque es una espada de doble filo.
Sí, es muy cómodo y fácil no establecer un contrato escrito y dejar todas las condiciones habladas, sobre todo si no se cumplen todos los requisitos generales, como una estabilidad laboral o un precio de las rentas adecuado.
No obstante, tiene su lado malo, y es que tanto el propietario como el inquilino queda totalmente desprotegido. Ya sea de manera intencional, con mala fe, o por sucesos imprevistos e involuntarios, pueden darse situaciones que lleguen a perjudicar a los implicados.
Situaciones en las que os podéis pillar los dedos
Pueden surgir muchos problemas a raíz de alquilar un piso sin contrato, tantos como imprevistos existen en la vida, sin embargo, una lista de clásicos es:
Para el arrendador
- Impagos: Al dificultarse el poder demostrar la existencia del alquiler, también lo hace el demostrar la obligación de pago de sus rentas.
- Dificultades para recuperar la vivienda: Al no establecerse una fecha de comienzo y finalización de la operación, el inquilino puede justificar la existencia del alquiler y, por tanto, su «derecho» a vivir en la vivienda, lo que podría complicarte poner fin al arrendamiento.
- Sanción por no depositar la fianza: Si bien es legal establecer las condiciones del arrendamiento de manera verbal, recibir una fianza por parte del inquilino y no se deposita en la Administración correspondiente y esta se entera, podría sancionarte con una multa. Además, al no haber declarado la operación y estar obteniendo ganancias con ella, Hacienda puede multarte con un importe de entre el 50% y el 150% de la cantidad no declarada.
Para el arrendatario
- Devolución de la fianza: Al no haber constancia de la existencia del arrendamiento, tampoco lo hay de tu entrega de la fianza, por lo que al finalizar la operación, el propietario podría quedarse con ella.
- Reclamar reparaciones: el arrendador tiene la obligación de llevar a cabo ciertas reparaciones de mantenimiento, de las cuales se podría desentender al no existir una relación contractual.
- La obligación de abandonar la vivienda: El propietario podría reclamar la vivienda sin darte el preaviso que establece la ley, ya que no existe un documento que le obligue a ello.
Más vale prevenir que curar, así que al alquilar un piso haz contrato
Lo hemos escuchado siempre: más vale prevenir que curar, y al alquilar un piso se puede aplicar igual. Si no quieres tener que estar sufriendo o persiguiendo abogados para solucionar problemas que se te hacen difíciles de demostrar, piénsalo dos veces antes y establece un contrato de alquiler. Y este consejo sirve tanto si eres arrendador como si eres arrendatario, a veces pensar en el futuro puede facilitar mucho las cosas.
En eso Housfy puede ayudarte. Nuestro equipo de expertos acompaña a cada uno de nuestros clientes desde el primer momento hasta el final de la vida de la operación, así no tienen que preocuparse por nada y pueden contar con un alquiler seguro y cómodo.
