Comprar una vivienda requiere muchos trámites y documentación. Hay que pasar por distintas fases como la elección del inmueble, el contrato de compraventa y encontrar la hipoteca más adecuada dependiendo de nuestras necesidades y situación financiera. En todos estos procedimientos, es lógico no conocer todos los aspectos, pero es importante tener en cuenta ciertos conceptos, por ejemplo al solicitar una hipoteca. ¿Sabes qué es y cómo se calcula la TAE? Puede que hayas escuchado este término en alguna ocasión, y de no ser así, te contamos todos los detalles que debes saber sobre ella.
Tasa Anual Equivalente o TAE
La Tasa Anual Equivalente (TAE) en las hipotecas es un tipo de indicador más relevante al contratar una hipoteca. La TAE hace referencia al precio real del préstamo hipotecario, es decir, un porcentaje que incluye los costes asociados a dicha operación. Estos pueden ser los tipos de interés, comisiones, gastos, plazos y formas de amortización. De modo que, es significativo conocer la TAE para comprar diferentes ofertas del mercado y elegir la que mejor nos convenga. Más adelante entramos en detalles de cómo se calcula la TAE.
En definitiva, esta tasa indica el porcentaje que debemos pagar de los intereses de una hipoteca, y que es una de las principales fuentes de beneficios que obtienen las entidades bancarias por la hipoteca.
La fórmula de la TAE
La TAE se calcula a través de una fórmula matemática, que tienen en cuenta el TIN , la frecuencia de los pagos, que puede ser mensual (12), trimestral (4), semestral (2) o anual (1), las comisiones bancarias, y los gastos de la operación.
Donde:
- r = es el tipo de interés nominal anual (TIN) en tanto por uno
- f = es la frecuencia de los pagos del préstamo hipotecario
Diferencias entre la TAE y el TIN
La TAE es un concepto financiero muy ligado a la Tasa de Interés Anual (TIN), aunque este último no es tan complejo. La TIN solamente se refiere al interés y no a las demás variables de un préstamo hipotecario. Se centra en indicar el tanto por ciento dejando de un lado las comisiones u otros gastos económicos. Por lo que es un valor menos preciso que la TAE, no tiene por qué ser anual y se obtiene sumando el euríbor al interés acordado.
Para resumirlo:
- La TAE da al cliente información financiera
- El TIN no cuenta con una medida temporal en la que tener referencia
- El TIN es un tipo de interés fijo, mientras que para calcular la TAE se incluye el tipo de interés nominal, comisiones, gastos, entre otros.
- Con la TAE podemos comprar ofertas de los distintos bancos y nos da más información sobre lo que recibiremos con un depósito y lo que pagaremos por una hipoteca.
¿Qué productos financieros tienen la TAE?
Dentro de toda la cartera de productos financieros, podemos encontrar que la TAE está presente en los siguientes:
- Hipotecas: como tienen un plazo de devolución mayor a un año, la TAE puede variar y más especialmente ene el caso de las hipotecas fijas, que se modificará conforme los tipos de interés vayan cambiando.
- Préstamos: por lo general, suelen contar con tipo fijo, por lo que nos permitirá saber desde un principio cuanto dinero se va a devolver al banco.
- Productos de ahorro: en algunos como cuentas o seguros, la TAE nos indica el beneficio generado por el dinero depositado.
¿Dónde puede estar presente la TAE?
Cómo hemos mencionado anteriormente, la TAE solo estará presente en los importes que sean obligatorios y supongan un coste directo. Por ello, destacamos las diferentes gastos en los que puede darse el caso:
- Comisiones de apertura: se produce una sola vez y al principio de la operación, cuando se contrata la hipoteca. El porcentaje puede variar entre el 0,5 % y el 1 %.
- Comisiones de cancelación o amortización anticipada: siempre y cuando se solicite, ya que no es de obligado realizarla. Si decidimos asumir los gastos de cancelación de la hipoteca, ya sea de forma completa o parcial, antes de finalizar con el plazo establecido, entonces si se tendrá en cuenta la TAE.
Lo que no incluye la TAE
En relación con las hipotecas, que dan exentos de la TAE aquellos los gastos que debas abonar a terceros, como los gastos de notaría e impuestos. Por ley, también quedan fuera todos los costes relativos a los seguros, y garantías.
Te interesa saber que…
Con el objetivo de mejorar la transparencia de los productos financieros en España, es obligatorio que la TAE conste en la documentación y en la publicidad. Respecto a las hipotecas variables, la TAE se calculará partiendo del caso en que el tipo de interés y los demás gastos se mantendrán en el valor que tienen en el momento del cálculo.
Para estos supuestos, la entidad financiera deberá utilizar la denominación de “TAE variable” a efectos informativos.
¡Ya sabes cómo se calcula la TAE! A partir de ahora debes prestar especial atención a este porcentaje, que juega un papel importante dentro de las operaciones que realices en tu hipoteca. Si quieres mejorar la hipoteca con Housfy lo tienes fácil. Gestionamos tu hipoteca de principio a fin para que no tengas que preocuparte por nada. ¡Adelante!