Pasos para encontrar planta baja en alquiler
Encontrar un alquiler de planta baja puede ser complejo. Para evitar caer en la frustración de no toparte con ninguna oferta, te mostramos una serie de consejos para alquilar una planta baja de forma sencilla:
- ¿Cuál es tu presupuesto? Establece cuál es la cuantía mensual que quieres dedicar al pago de la renta. El máximo debería ser un 30% de tus ingresos.
- Busca en portales inmobiliarios. Utiliza filtros para realizar una búsqueda más específica y obtener resultados más exitosos. Nuestro portal Housfy te servirá para poner en práctica este paso tan importante gracias a los parámetros que puedes seleccionar.
- La visita es obligatoria. Cuando se presente una planta baja que te gusta, visítala para verla en persona y asegurarte de que es igual que en las fotografías que veas en el anuncio.
- Firma el contrato del alquiler. Asegúrate de tener toda la documentación lista a la hora de firmar el contrato. Una vez hecho, ¡ya puedes disfrutar de tu planta baja!
Precio de una planta baja en alquiler
El alquiler de una planta baja puede tener muchos precios. La razón principal es que se trata de un elemento que puede alterarse fácilmente dependiendo de los siguientes factores:
- Situación del mercado del alquiler. Si se ofrecen pocas plantas bajas y hay una demanda muy elevada, lo más seguro es que el precio de las rentas sea también alto.
- Zona donde se ubique el inmueble. Comprueba cuál es el precio medio del alquiler en el área en que quieres alquilar una planta baja para hacerte una idea de lo que podrías pagar mensualmente.
- Particularidades del hogar. Decide cómo es el inmueble que buscas y toma nota de las características que quieres sí o sí. Por ejemplo, el número de habitaciones, la orientación de la vivienda o la existencia de terraza con o sin piscina.
Documentación para el alquiler de una planta baja
Para alquilar una planta baja debes tener en cuenta una serie de documentos obligatorios. Te los enumeramos:
- DNI / NIE. Deberás tenerlo vigente a la hora de firmar el contrato de alquiler.
- Tres últimas nóminas. Permitirá al casero conocer tus ingresos mensuales.
- Contrato laboral. Necesario para comprobar cuál es tu solvencia económica de cara al pago de las rentas.
- Fianza del alquiler. La Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) establece que abonar la fianza en metálico es obligatorio.
También existen otros documentos no obligatorios que puede solicitar el propietario para acabar de confirmar tu capacidad de pago. Son, en esencia, la última declaración del IRPF, un aval o una carta de presentación.
Derechos de los inquilinos
La Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) establece una serie de derechos de los inquilinos. Enumeramos cuáles son a continuación:
- El arrendatario tiene derecho a negociar la renta del alquiler con el casero. Puede hacerlo en el momento de la firma del contrato o en las actualizaciones anuales.
- Al acabar el alquiler, el arrendatario puede renovar el contrato. Si decide terminar el contrato, debe avisar con 4 meses de antelación.
- Derecho a anular el contrato antes de que acabe tras pasar los primeros seis meses desde la fecha de la firma.
- La fianza debe recuperarse si el propietario comprueba que no se han ocasionado daños en la vivienda por parte del arrendatario.
- Hay derecho a exigir reparaciones de desperfectos al propietario, siempre y cuando estas sean necesarias para asegurar la habitabilidad del inmueble.
- El inquilino tiene derecho de tanteo y retracto, por lo que si el propietario decide vender la planta baja, él será el primero en recibir la oferta de compra.