Quizás seas propietario de un edificio, lo tengas alquilado, pero quieras venderlo. La Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), estipula cuáles son los derechos del inquilino en caso de que quieras vender piso en alquiler. El pago de cualquier indemnización a inquilino por venta del edificio también queda recogido en dicha ley. La última reforma de la LAU fue en junio de 2013 y esto es lo que establece:
Registro de la propiedad
Existen diferencias entre los contratos de alquiler inscritos en el registro de la propiedad y los que no lo están. Según la actualización de la LAU, si el contrato no consta en el registro de la propiedad se anulará automáticamente con el cambio de propietarios. No obstante, si consta en el registro, el nuevo propietario está obligado a respetar las cláusulas y la duración del contrato. Eso sí, dicha modificación sólo afectará a los contratos de alquiler posteriores a junio de 2013.
Poder de Negociación de un alquiler no registrado
Una indemnización a inquilino por venta del edificio, será poco plausible si el contrato no consta en el registro. Básicamente porque el inquilino pierde poder de negociación. Sin embargo, que el contrato se cancele una vez se realice la venta no significa que el inquilino pierda todos sus derechos. En caso que el nuevo propietario quiera destinar el piso al alquiler, el anterior inquilino tendrá prioridad para arrendar de nuevo el edificio. Aunque tendrá que adaptarse a las nuevas condiciones contractuales.
Alquiler inscrito en el registro
Si el contrato de alquiler está inscrito en el registro todo cambia. El arrendado tendrá más poder de negociación para pedir indemnización a inquilino por venta del edificio. Esto se debe a qué el nuevo comprador deberá respetar el contrato hasta su finalización. Esto hace que el número de interesados en comprar piso sea menor. Si el propietario tiene prisa por vender piso alquilado el arrendado puede jugar sus cartas para pedir una contraprestación para finalizar el contrato con anterioridad.
Indemnización a inquilino por venta del edificio
El inquilino tiene el derecho a no querer enseñar el piso. De este modo, difícilmente se venderá. No obstante, siempre es recomendable dialogar y llegar a una solución intermedia. De este modo, a parte de evitar tensiones innecesarias, ambas partes pueden salir beneficiadas. Aunque no siempre se da una indemnización a inquilino por venta del edificio, estas son las posibles contrapartidas de un acuerdo:
Indemnización a inquilino por venta del edificio: En forma de dinero
El pago de una indemnización a inquilino por venta del edificio a veces suele desencallar cualquier situación. En la mayoría de casos, los inquilinos estarán dispuestos a enseñar el piso a los interesados si se les ha prometido el pago de una cantidad determinada.
Indemnización a inquilino por venta del edificio: Mejores condiciones
La alternativa a una indemnización suele venir en la mejora de las condiciones contractuales. En algunos casos el inquilino te pide renovar el contrato con mejores condiciones. Esta es la contrapartida para facilitarte la venta. De este modo, una vez vendido el piso, el siguiente propietario deberá respetar el último contrato firmado hasta su finalización. Todos salen ganando.
La jugada maestra
Si la relación entre arrendador y arrendatario es buena puede que no se deba pagar una indemnización a inquilino por venta del edificio. Simplemente puede que se acuerden unos horarios específicos de visita para que puedas vender inmueble lo antes posible. Sin contraprestación alguna. Esto es lo mejor para el propietario, pero debes de entender que aquí todo el mundo juega sus cartas.
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