¿Por qué necesitas el certificado energético para vender tu piso?

El certificado energético es un documento de índole oficial que sirve para certificar la eficiencia energética de un hogar habitable.

Como su propio nombre indica, se presenta en forma de certificado, aunque dicha información también se plasma en forma de etiqueta energética. Esta etiqueta muestra el nivel de calificación energética de la propiedad.

Así, los objetivos principales del certificado energético son:

• Informar tanto a comprador como vendedor acerca del consumo energético de la propiedad.
• Ofrecer recomendaciones para el uso eficiente de la energía y ahorro energético.

El certificado energético de cada inmueble incluye la siguiente información:

• Datos precisos de la propiedad.
• Información del técnico y del propietario.
• Descripción del proceso de calificación.
• Referencia a la normativa correspondiente.
• Calificación energética obtenida.
• Fecha de vencimiento del certificado.
• Documento de recomendaciones para mejorar el uso energético del inmueble.

El precio del certificado energético de una vivienda no cuenta con un precio específico. Su importe variará en función de los siguientes factores:

• Tipo de inmueble.
• Metros cuadrados útiles.
• Ubicación del hogar.
• Zona climática del inmueble.
• Instalaciones con fuente de energía renovable.

La falta de regulación de precios establecida por el Gobierno de España permite que cada técnico fije su propio precio. No obstante, existen unos precios aproximados.

Por lo general, para una propiedad de menos de 80 metros cuadrados, el coste puede oscilar entre los 50 y 250 euros. Así, cuanto más grande sea la propiedad, más caro será el certificado.

Conviene destacar que algunas comunidades autónomas cobran tasas administrativas por registrar el certificado en cuestión.

Según establece el Real Decreto 235/2013, que regula el certificado energético, el vendedor del inmueble es el responsable de abonar el coste del documento.

La vigencia del certificado energético se extiende durante 10 años, siempre que la calificación de la etiqueta energética tenga un rango de la A a la F.

Si la vivienda está calificada con la última categoría, la G, el período de validez se reducirá a los 5 años.

Saber cómo obtener el certificado energético puede ser lioso. Por eso, te dejamos a continuación los pasos que debes tener en cuenta:

1. Escoge una empresa, arquitecto o ingeniero autorizado para realizar el documento.
2. Programa una visita con el técnico especializado para recoger toda la información necesaria sobre las condiciones energéticas de la vivienda.
3. Espera a que el técnico elabore el informe de eficiencia energética.
4. Acude al organismo competente de la zona para registrar el informe.
5. Una vez registrado y aprobado, obtén la etiqueta energética oficial.

Sí, es obligatorio. Así lo establece el Real Decreto 235/2013, del 5 de abril, que determina la obligación de cualquier inmueble en venta a tener el certificado energético.

Toda vivienda que se venda debe disponer de un certificado energético. Esto hace efecto tanto a edificios completos como a viviendas individuales.

Esta obligatoriedad se recoge en el Real Decreto 235/2013, del 5 de abril, donde se especifica que los vendedores de un inmueble pondrán a disposición del comprador dicho certificado.

No obstante, existen una serie de excepciones donde el certificado energético no será necesario:

• Edificios de protección oficial.
• Inmuebles religiosos o monumentos históricos.
• Propiedades con una superficie útil inferior a los 50 metros cuadrados.
• Talleres u otros espacios que no sean de uso residencial.
• Construcciones provisionales con menos de dos años en pie.
• Hogares que tengan un uso máximo de cuatro meses al año o que generen un consumo de energía inferior al 25 % anual.

Existe la posibilidad de que, en tu certificado energético, se incluyan sugerencias para mejorar la eficiencia energética de tu hogar. En Housfy, te proporcionamos algunas ideas adicionales a estas recomendaciones, tales como:

• Renovar ventanas, puertas, paredes y suelo para minimizar la pérdida de calor o frío y apostar por el aislamiento térmico.
• Reemplazar la caldera por un sistema de climatización de bajo consumo.
• Apostar por las luces LED y cambiar a un sistema eléctrico más moderno, dejando atrás las bombillas tradicionales.
• Instalar placas fotovoltaicas para reducir la factura eléctrica y priorizar las energías renovables.

Sí. Como decíamos, el certificado energético es obligatorio para vender cualquier tipo de hogar. Por ende, se incluyen los pisos pequeños.

Hoy en día es imposible vender una propiedad sin el certificado energético. Por ende, te recomendamos que lo solicites cuanto antes, pues, de lo contrario, podría llegarte una multa económica.

Las penalizaciones económicas en este caso suelen oscilar entre los 300 y los 600 euros, aunque se tratan de valores aproximados.

Hoy en día, uno de los factores que más valoran los compradores de viviendas es una buena calificación energética. Por ello, invertir en la mejora de la eficiencia energética de tu vivienda será un gran acierto.

Al mismo tiempo, realizar mejoras en este campo te permitirá acceder a una serie de bonificaciones en el IRPF a la hora de hacer la Declaración de la Renta. Son estas:

• Deducción por obras para la reducción de la demanda de calefacción y refrigeración. Como mínimo, debe reducirse un 7 %  el indicador de consumo energético.
• Deducción por obras para la mejora de consumo de energía primaria no renovable. Deben reducir un mínimo del 30 % el indicador de consumo de energía o contar con una etiqueta energética con la letra B o superior.
• Deducción por obras de rehabilitación energética en edificios residenciales. Reducción de un 30 % mínimo o contar con una etiqueta energética con la letra B o superior.