Partimos de la siguiente situación: en el año 2012, adquieres una propiedad por 100.000 euros, la cual vendes en 2022 por 150.000 euros. En el momento de la venta, el valor catastral del suelo es de 50.000 euros (60 % del suelo y 40 % de la construcción).
Método real
Comencemos por el método real. Para ello, restamos el valor de compra al valor de venta final. A continuación, multiplicamos la diferencia por el porcentaje del valor catastral del suelo de la propiedad.
La fórmula es la siguiente:
Base imponible = (valor de venta - valor de compra) x porcentaje valor catastral del suelo
Una vez rellenamos la fórmula, quedará así:
Base imponible = (150.000 - 100.000) x 0,60 = 30.000 euros
Recuerda que el porcentaje del valor catastral de la propiedad lo encontrarás en el último recibo del IBI o en la sede online del Catastro.
Método objetivo
En este caso, tomamos como referencia el valor catastral del suelo para calcular la base imponible del impuesto, dejando de lado la diferencia entre el precio de compra y el de venta.
La fórmula sería:
Base imponible = valor catastral del suelo x coeficiente plusvalía
Rellenamos la fórmula con los datos del ejemplo:
Base imponible = 50.000 € x 0,10 = 5.000 euros
Nos interesa escoger el importe más bajo para calcular la plusvalía municipal. Por ende, utilizaremos el método objetivo. En total, abonamos:
Importe a abonar de la plusvalía = Base imponible x 30 % (tipo máximo legal)
Al sustituir con los valores:
Importe a abonar de la plusvalía = 5.000 x 0,3 % = 1.500 euros