Nota simple para vender tu piso: qué contiene y cómo solicitarla

La nota simple es un documento informativo que resume los datos que tiene el Registro de la Propiedad sobre un inmueble determinado y en un momento concreto.

Este documento es muy útil, aunque no obligatorio, al vender una vivienda, para garantizar la mayor transparencia y así favorecer la negociación durante la compraventa, pues en una nota simple se puede:

• Comprobar la veracidad de la titularidad. Si hay dos copropietarios, así aparecerá también, como nuestra foto de ejemplo de nota simple.
• Confirmar que la vivienda no tiene cargas.

La nota simple es un requisito en estos casos:

• Solicitar una hipoteca para financiar una vivienda, para la tasación oficial homologada, expedida en los últimos tres meses.
• Pedir la autorización para vender una Vivienda de Protección Oficial (VPO) o una Vivienda de Protección Pública (VPP). La deberás adjuntar en tu solicitud.

Estos son los datos que incluye una nota simple:

• Información sobre la finca, como su ubicación, su superficie útil y superficie construida, las cuotas de participación en la comunidad de propietarios y la referencia catastral.
• Titularidad del inmueble, es decir, el propietario de la vivienda según el Registro de la Propiedad.
• Cargas, entre las que encontramos:
• deudas (como el pago de la comunidad de propietarios o derramas impagadas);
• hipotecas;
• contratos de arrendamiento vigentes;
• impuestos pendientes;
• embargos;
• etc.

Es posible que en la nota simple aparezcan deudas saldadas pero no canceladas registralmente, como una hipoteca. Será necesario cancelar la deuda vigente, por ejemplo, con el pago de las cantidades ante notario, a menos que el comprador se quiera subrogar a ella.

Es posible conseguir la nota simple por internet, en la página web del Colegio de Registradores. Para ello, habrás de proporcionar uno de estos datos:

• IDUFIR (Identificador Único de la Finca Registral);
• nombre o NIF del titular de la finca;
• datos registrales (provincia, municipio, registro donde está inscrita, etc.); u
• otros, como la dirección de la propiedad o la referencia catastral.

Los datos más fáciles de conseguir para solicitar una nota simple son la referencia catastral (desde la web de la Dirección General del Catastro) y los datos del titular (pues puedes pedir el DNI al vendedor), aunque con esta última opción podrán aparecer también otros derechos inscritos a favor suyo.

Por eso, cuanta más información puedas aportar al Colegio de Registradores, más fácil será localizar la vivienda para expedir el documento correspondiente.

Pedir una nota simple no es gratis. Si acudes presencialmente al Registro de la Propiedad, la nota simple cuesta 3,64 € por inmueble.

También puedes pedirla telemáticamente, en cuyo caso el precio es de 9,02 € por inmueble (más impuestos) por la tramitación, incluso cuando no se haya podido localizar la finca por falta de información. Si además solicitas una traducción al inglés, habrá que sumar 30 € (más impuestos) al precio de la nota simple.

Este precio puede verse incrementado si contratas los servicios de intermediarios. En el caso de vender un piso con una inmobiliaria, es probable que el coste de la nota simple ya esté incluido en la comisión, aunque dependerá del tipo de agencia y del plan que hayas contratado.

La nota simple suele tardar entre las 24 h y las 48 h. En algunas ocasiones, el Registro te la enviará antes.

De pedirla desde la web, el solicitante recibirá, una vez expedida, un mensaje de correo electrónico con un enlace desde donde podrá descargar su nota simple en PDF.

La nota simple no tiene fecha de caducidad como tal; eso sí, en ella aparece la fecha de expedición. Tener una nota simple antigua puede no reflejar la realidad actual de tu inmueble:

• Si quieres vender tu vivienda, es comprensible que el comprador quiera consultar la versión más actualizada de la nota simple.
• Si quieres tasar tu casa para pedir una hipoteca, el tasador requerirá que la nota simple haya sido expedida durante los últimos 3 meses.