La visibilidad es clave en la venta inmobiliaria. Las agencias profesionales no solo ponen un anuncio en un portal; diseñan campañas de marketing integrales y personalizadas.
Esto incluye fotos profesionales que resaltan las mejores características de la vivienda, vídeos o tours virtuales para captar el interés online, presencia en múltiples portales y redes sociales, y en ocasiones publicidad pagada segmentada.
En un mercado cada vez más digital, las estrategias aumentan exponencialmente las oportunidades de venta y mejoran la percepción del inmueble. Con este objetivo nació el home staging, una técnica de marketing inmobiliario que consiste en preparar una vivienda para que luzca lo más atractiva posible ante los potenciales compradores.
No se trata de reformar, sino de optimizar: despersonalizar el espacio, mejorar la iluminación, reorganizar el mobiliario o incluso añadir decoración neutra y moderna.
Esta técnica acostumbran a usarla las inmobiliarias para vender un piso, porque consigue acelerar los tiempos de venta y mejorar el precio final de la operación. ¿Por qué? Porque el comprador se siente más cómodo, puede visualizarse viviendo en el espacio y percibe un valor añadido. Es psicología aplicada a la vivienda. En un mercado donde la primera impresión es clave (y muchas veces online), destacar visualmente es medio camino ganado.
No hace falta gastar mucho en una reforma costosa, a veces los pequeños detalles y una limpieza a fondo marcan la diferencia.