Cómo calcular el IRPF por la venta de una vivienda en 2024

El Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) es un tributo de carácter personal y directo que grava la renta de las personas físicas de acuerdo con sus circunstancias personales y familiares.

Se basa en el beneficio económico que obtiene un propietario con la venta de su vivienda, por lo que solo deberás pagarlo si obtuviste ganancias económicas con la operación. Para declarar el IRPF, deberás rellenar la casilla 1626 en la Declaración de la Renta 2023, y en ella incluir la referencia catastral de la vivienda vendida.

Para pagar el IRPF en la Declaración de la Renta hay que basarse en una escala de gravámenes, es decir, unos porcentajes que se aplican a las ganancias patrimoniales, y a partir de esta operación se obtiene la cuantía a pagar el IRPF.

En 2024, la escala de gravámenes contempla estos porcentajes:

Estos tramos se aplican de manera progresiva, por lo que a los primeros 6.000 € se les aplica el 19%, a partir de los 6.000 € y hasta los 50.000 el 21%, y así sucesivamente. De esta forma, se van sumando los gravámenes correspondientes cuanto mayor sea la ganancia.

Para calcular el IRPF por la venta de una vivienda, hay que seguir unos pasos. 

Pongamos como ejemplo un piso cuyo valor de compra fue de 200.000 € y el de venta de 250.000 €.

Primero hay que calcular la ganancia patrimonial, restando el precio de venta al precio de compra: 

  250.000 € - 200.000 € = 50.000 €

Y por último, se debe aplicar el tipo de gravamen correspondiente, al tener una ganancia de 40.000 €, hay que acogerse a los dos primeros, 19% para los primeros 6.000 € y el 21% para los 44.000 € siguientes.

1r tramo: 6.000 € x 19% = 1.140 

2º tramo: 44.000 € x 21% = 9.240 €

TOTAL A PAGAR: 1.140 € + 9.240 € = 10.380 €

Según este ejemplo, se deberían pagar 10.380 € de IRPF por la venta de una vivienda a Hacienda.

Sí, lo cierto es que puedes optar a beneficios fiscales en el pago del IRPF en 2024, siempre y cuando la venta sea de tu vivienda habitual y realizaras obras de mejora en ella.

• Deducción del 20%: Si las obras fueron para obtener un ahorro en la calefacción del 7%. Para conseguir esta reducción deberás aportar un certificado que acredite el ahorro obtenido antes de realizar las obras y una vez finalizadas.

• Deducción del 40%: Si realizaste obras para disminuir un mínimo del 30% en los indicadores de energías primarias no renovables y consigues una etiqueta de clase A o B en el certificado energético.

• Deducción del 60%: Si eres propietario de todo un edificio, y acreditas que has reducido al menos un 30% el consumo de energía primaria no renovable en el conjunto del edificio.

Para poder acceder a las deducciones del IRPF por la venta de tu vivienda, deberás aportar algunos documentos que lo justifiquen:

• Extracto con la información fiscal de la hipoteca 

• Factura con la prima de los seguros vinculados para incluirlos como gastos

Sí. Aunque el pago del IRPF es obligatorio para toda persona física, es cierto que existen algunos casos que quedan exentos.

• Si eres mayor de 65 años y vendes tu vivienda habitual.

• Si eres mayor de 65 años y vendes cualquier elemento patrimonial, mueble o inmueble, destinando las ganancias a la constitución de la renta vitalicia y estas tienen un límite de 240.000 euros.

• Si eres una persona en situación de severa o gran dependencia y vendes tu vivienda habitual.

• Si vendes tu vivienda habitual y las ganancias las reinviertes en la adquisición de una nueva vivienda habitual en un plazo de dos años antes o después de la venta.

Para poder acceder a cualquiera de estas deducciones del IRPF por la venta de tu vivienda, deberás aportar todos los documentos que justifiquen tu situación, tales como tu Documento de Identidad (DNI o NIE), la acreditación de situación de dependencia y las facturas de la compraventa y la renta vitalicia.

Pero, ¿Qué entiende Hacienda por vivienda habitual? Una vivienda habitual, según la Administración, es aquella residencia en la que su titular ha vivido de manera continua durante al menos 3 años. Además, deberá estar empadronado en el municipio en el que se encuentra el inmueble.