Cédula de habitabilidad para alquilar: qué es y por qué es tan importante

La cédula de habitabilidad es un documento utilizado en algunas comunidades autónomas para acreditar que una vivienda cumple todos los requisitos para destinarla como residencia para personas, según lo estipulado por la ley vigente.

Existen varios tipos de cédula de habitabilidad:

• De primera ocupación (para viviendas de obra nueva).
• De segunda ocupación (para viviendas de segunda mano).
• De rehabilitación (para viviendas a las que se les haya hecho una reforma integral).

Según la ley de tu comunidad autónoma y el tipo de vivienda, necesitarás pedir una cédula de habitabilidad u otra.

En las comunidades autónomas que exigen la cédula de habitabilidad, este documento es un requisito para contratar los suministros de agua, luz y gas, según la Ley 18/2007 del derecho a la vivienda.

Además de garantizar que el inmueble tiene las condiciones mínimas de salubridad e higiene, este documento indica el umbral máximo de ocupación, es decir, el máximo de personas que pueden habitar la vivienda en concreto y que debe respetarse según la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU).

En algunas comunidades autónomas, como Catalunya, la multa por alquilar sin cédula de habitabilidad puede ir desde los 90.000 € hasta los 900.000 €, pues se considera una infracción grave.

Tampoco es legal alquilar un local como vivienda, pues no cumple los requisitos de habitabilidad. Al alquilar un local, así deberá figurar en el contrato de alquiler. Por lo tanto, si el inquilino está destinando un local a vivienda, corre el riesgo de recibir sanciones por parte de las autoridades competentes.

Para obtener el certificado de habitabilidad para alquilar tu vivienda, deberás seguir los siguientes pasos:

1. Contacta con un arquitecto, arquitecto técnico, aparejador o ingeniero de la edificación, que visitará tu vivienda y hará un estudio.
2. El técnico emitirá un informe visado por el Colegio de Arquitectos, en el que se acreditará la habitabilidad de la vivienda.
3. Inicia el trámite en la Sede Electrónica de tu comunidad autónoma para expedir la cédula. Deberás aportar el certificado de idoneidad firmado por el técnico y documentación acreditativa (como las escrituras, la primera inscripción registral o la licencia de obras).

En caso de no considerarlo un espacio habitable, el técnico te proporcionará una lista de mejoras que deberás llevar a cabo para obtener el certificado.

De todos modos, consulta los requisitos y documentos específicos en tu comunidad autónoma para emitir este certificado.

La cédula de habitabilidad no es gratis, sino que comprende varios trámites que suponen un gasto.

Por un lado, el arquitecto que haga el informe de habitabilidad cobrará unos honorarios, que actualmente rondan alrededor de los 60 €.

Visar el informe del técnico por el Colegio de Arquitectos de tu región costará entre los 10 € y los 14 €.

Finalmente, en algunas comunidades deberás pagar una tasa pública para expedir la cédula de habitabilidad:

• Baleares: 12,02 €
• Asturias: 14,04 €
• Cantabria: 0 €
• La Rioja: 15,27 € para viviendas de nueva construcción y 8,74 € o 19,83 € para viviendas de segunda mano, según su antigüedad.
• Comunitat Valenciana: depende de los metros cuadrados de superficie útil de la vivienda.

En Catalunya, el certificado de segunda ocupación cuesta 19,85 € (o 13,9 si se pide telemáticamente) y el de primera ocupación vale 43,05 € para registrar una sola vivienda.

La validez de la cédula de habitabilidad depende de cada comunidad autónoma y de la antigüedad de la vivienda.

Te dejamos aquí cuánto dura una cédula de habitabilidad vigente, en general, según la región:

• Asturias: 10 años
• Baleares: 10 años
• Cantabria: 15 años
• Catalunya: 15 años
• Extremadura: 10 años
• La Rioja: 5 años
• Murcia: 15 años
• Navarra: 10 años
• Comunitat Valenciana: 10 años

Aun así, consulta si tu Ayuntamiento o comunidad tiene una normativa específica en cuanto a la validez de este certificado.

¿Es obligatorio renovar la cédula de habitabilidad? Sí. Dependiendo de la normativa de la CC. AA., no renovar la cédula de habitabilidad puede conllevar el cese de los servicios de agua, luz y gas, además de sanciones.

Si tu cédula de habitabilidad aún no ha caducado, solicitar una copia es gratis en regiones como Catalunya, Baleares o Cantabria.

Solo debes acudir al Ayuntamiento o acceder en la Sede Electrónica y solicitar un duplicado de tu cédula de habitabilidad ya vigente.

Para saber si un inmueble dispone de cédula de habitabilidad, lo más rápido es preguntar al propietario o a la agencia inmobiliaria.

Si no, puedes acudir al ayuntamiento o a la oficina de la vivienda de tu municipio. Si la vivienda tiene la cédula de habitabilidad vigente, podrás solicitar una copia de ella. En muchos casos, este trámite es gratuito.