La novación hipotecaria cuesta dinero. A continuación, te detallamos cuáles son los gastos principales y quién se hace cargo de ellos.
Gastos de la novación a cargo del banco
Tal y como establece el Artículo 14 de la Ley 5/2019, reguladora de los contratos de crédito inmobiliario, los costes que deberá asumir la entidad bancaria encargada de la novación son:
- Honorarios de la gestoría. La gestoría correspondiente paga los impuestos necesarios e inscribe las modificaciones del préstamo en el Registro de la Propiedad.
- Honorarios de la notaría. Los aranceles notariales por la escritura del acuerdo de novación comprenden entre el 0,2% y el 0,5% del importe restante de la hipoteca.
- Gastos de inscripción en el Registro de la Propiedad. El prestamista se encarga de la inscripción de los cambios en el Registro. Tiene un precio medio que oscila entre el 0,1% y el 0,25% del capital pendiente de abonar.
- Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados (IAJD). Lo abona la entidad bancaria y su precio oscila entre el 0,5% y el 2% sobre el aumento del préstamo.
Gastos de la novación a cargo del cliente
Los costes que abona el cliente corresponden a la comisión por novación. El importe oscila entre el 0% y el 1% del capital pendiente de la hipoteca, en función de los cambios:
- Comisión por cambio de tipo de interés. Si realizas una novación para cambiar de tipo de interés variable a fijo, no deberás abonar la comisión. Una medida que se extiende desde el 24 de noviembre de 2022 hasta el 31 de diciembre de 2023.
- Comisión por ampliación de plazo. El porcentaje no podrá superar el 0,1% del importe pendiente.
- Comisión por otro motivo. Ante cualquier otro cambio, el precio se pacta previamente con la entidad bancaria. Oscila entre el 0,5% y el 1%.